Si te encuentras constantemente a punto de superar tu límite de datos o si tu conexión es demasiado lenta para manejar las aplicaciones que utilizas, echa un vistazo en profundidad a tu plan de Internet para ver si es el momento de una actualización. Puede que no te des cuenta, pero probablemente tienes más control sobre tu conexión a Internet de lo que crees. Probando algunos consejos y técnicas básicas, puedes mejorar drásticamente tu conexión a Internet y empezar a sacar el máximo partido a tu plan.
Comprueba tu velocidad de Internet
La velocidad que pagas es la que anuncia tu proveedor de Internet, pero puede que no la estés obteniendo. La velocidad real de Internet depende de muchos factores: el tipo de conexión, la distancia a la estación de conmutación más cercana e incluso las condiciones meteorológicas pueden afectarla. Si pagas por una determinada velocidad y obtienes menos que eso, pregunta a tu proveedor de Internet si hay algo que se pueda hacer al respecto. También puedes comprobar tu velocidad de Internet con una herramienta online como Speedtest.net o Fast.com. El sitio de pruebas de velocidad también te permitirá comparar tus resultados con los de otros usuarios de tu zona geográfica.
Solucionar los problemas de tu módem
El primer paso es asegurarse de que tu módem funciona correctamente. Si actualmente tienes problemas con tu conexión a Internet, puede ser que tu módem no esté funcionando correctamente. Para comprobar la salud de tu módem, simplemente apágalo y desenchúfalo durante 30 segundos antes de volver a enchufarlo. Este proceso, conocido como ciclo de energía, reiniciará el módem y refrescará su conexión a la red del proveedor de Internet.
Gestiona la ubicación de tu router
Hay ciertas partes de tu casa que pueden afectar a la captación de la señal Wi-Fi por parte del router. Debes evitar colocarlo en una esquina o cerca de otros equipos electrónicos, ya que esto puede causar interferencias en la intensidad de la señal. Una ubicación ideal para los routers es en algún lugar del centro de la casa y en una zona abierta con mínimos obstáculos. Esto le permitirá proporcionar una cobertura óptima y garantizar una conexión segura.
Prueba a cambiar el modem
Si sigues teniendo problemas con las velocidades de descarga lentas o los problemas de conexión intermitentes, considera la posibilidad de sustituir el router por un modelo más nuevo. Las recientes actualizaciones de la tecnología inalámbrica permiten ahora una mayor velocidad de transferencia de datos en distancias más largas que los modelos anteriores. Un nuevo router puede proporcionar un soporte muy necesario para dispositivos como reproductores multimedia en streaming y televisores 4K que requieren conexiones de alta velocidad para un rendimiento fluido.
Para llevar
Los paquetes de banda ancha a menudo se promocionan con velocidades excepcionales, pero lo que realmente usas cada mes y cuántos dispositivos utilizas al mismo tiempo puede tener un gran impacto en tu bolsillo. Si no controlas y optimizas tu uso, podrías estar desperdiciando cientos de dólares en datos cada año. Así que, en lugar de actualizar tu plan de Internet, prueba los trucos mencionados anteriormente para sacar el máximo partido a tu conexión a Internet actual.